1. ¿Qué es el trastorno de ansiedad generalizada?

Es un trastorno de ansiedad que afecta en torno al 2% de la población y que suele tener un curso crónico y fluctuante.

Se caracteriza por ansiedad y preocupación excesiva (anticipación aprensiva) que a la persona le resulta difícil controlar. La queja principal de la persona que sufre este trastorno se centra en la preocupación constante que no se limita a circunstancias únicas.

Además, esa preocupación no se refiere a problemas actuales y reales, sino que se relacionan con cualquier situación futura que es percibida como amenazante (posible pérdida de trabajo, problemas de salud, relaciones sociales y futuro en general).

 

  1. ¿Cuáles son los síntomas?

Los síntomas presentes en el trastorno de ansiedad generalizada (TAG) comprenden aspectos fisiológicos, cognitivos y conductuales.

 

  • Fisiológicos: Inquietud o sensación de estar atrapado, facilidad para fatigarse, irritabilidad, tensión muscular, problemas de sueño.
  • Cognitivos: preocupación generalizada y excesiva acerca de posibles acontecimientos futuros, intolerancia a la incertidumbre, sensación de falta de control ante los eventos anticipados, percepción acerca de una mayor probabilidad de ocurrencia de resultados negativos por aquello que les preocupa (p.e. temor a que le ocurra algo a un ser querido, miedo a perder el trabajo, temor a tener una enfermedad futura)
  • Conductuales: tendencia a comprobar si se cumplen las consecuencias temidas, evitación de situaciones que se consideran potencialmente peligrosas, intentos por controlar las consecuencias (p.e. llamar repetidas veces a un familiar para ver si se encuentra bien, intentos continuados por contrastar si se hacen las cosas bien en el trabajo, no permitir a los hijos que realicen ciertas actividades, aunque no entrañen peligro real)

 

  1. ¿Cuál es la causa del TAG?

La influencia ambiental, especialmente la intrafamiliar, parece jugar un papel predominante. En concreto, se refieren experiencias infantiles de apego caracterizadas por mayor rechazo o negligencia maternal, menor cariño maternal e inversión de roles (el niño o niña asumen roles que no le corresponden por edad en el contexto familiar)

No se ha encontrado que la genética desempeñe un papel específico sustancial, si bien los problemas de ansiedad son más comunes en familiares de personas con TAG.

Algunos modelos explicativos (Wells, 1995) hacen hincapié en dos tipos de preocupaciones aprendidas:

  • Preocupación por situaciones externas o internas que no son cognitivas (como por ejemplo las sensaciones físicas)
  • Preocupación sobre los propios procesos y sucesos cognitivos (preocupación por la preocupación)

Por otro lado, el mismo autor señala dos tipos de creencias que influyen en este trastorno:

  • Creencias positivas: la persona cree que la preocupación ayuda a afrontar las situaciones, por lo que en parte considera positiva y necesaria dicha preocupación. Es más, en muchos casos la persona se resiste a dejar de estar preocupado.
  • Creencias negativas: la persona cree también que no va a tener recursos para afrontar las preocupaciones.

 

Otros autores (Dugas et al., 2004) apelan a la intolerancia a la incertidumbre lo cual genera gran preocupación, orientación negativa hacia los problemas y falta de confianza para solucionarlos, y creencia positiva sobre la preocupación.

 

  1. ¿Qué complicaciones pueden aparecer en el curso del TAG?

Uno de los problemas más frecuentemente asociados al TAG en la presencia de DEPRESIÓN. Resulta especialmente importante tener en cuenta los síntomas depresivos ya que pueden ser responsables de una visión negativa de futuro con sentimientos de desesperanza.

Por otro lado, también pueden aparecer problemas somáticos (problemas gastrointestinales, síndrome de fatiga crónica, colon irritable, migrañas, etc.)

En algunos casos, se observan conductas de abuso de ansiolíticos, abuso de alcohol y uso excesivo de consultas médicas)

El propio TAG y lo recientemente expuesto puede generar un deterioro importante en la vida social, aumento de estresantes vitales menores e insatisfacción vital.

 

  1. ¿Qué tratamiento psicológico es eficaz para el TAG?

El foco de tratamiento se centra en:

  • Preocupaciones excesivas e incontrolables.
  • Tensión que acompaña a las preocupaciones.

 

Para ello se puede entrenar a la persona en relajación progresiva y en el manejo de la ansiedad. Las técnicas orientadas a reducir las interpretaciones poco realistas que la persona hace de los acontecimientos son necesarias (en concreto, aquellas orientadas a reducir la sobreestimación de la probabilidad de ocurrencia de eventos negativos y la tendencia a interpretar lo peor)

El tratamiento psicológico también incluye la prevención de conductas de evitación y comprobaciones, la organización del tiempo, el entrenamiento en resolución de problemas, y el aprendizaje para la aceptación de la incertidumbre.

Las técnicas de mindfulness han demostrado su eficacia para ayudar a la persona a vivir centrado en el presente sin dejarse llevar por las preocupaciones futuras.

 

 

  1. ¿Ayuda la medicación en el tratamiento del TAG?

 

El tratamiento principal para el TAG es la terapia psicológica. No obstante, para momentos agudos, o cuando la persona presenta elevados niveles de angustia o síntomas depresivos, resulta conveniente el tratamiento farmacológico.

 

 

Manuel Oliva Real

Psicólogo clínico

Colegiado Nº: M-10935